martes, 17 de septiembre de 2013

La difícil tarea de no publicar

Mantener el silencio sobre las decisiones que se toman al interior de las salas de redacción se ha convertido en un tema de debate sobre el que periodistas y medios no logran ponerse de acuerdo. 

Foto: Smartbusinessu.com

Las redes sociales como Facebook y Twitter pueden amenazar la integridad del proceso editorial. Antes estas reuniones donde se decidían editoriales minuciosas y a puerta cerrada pueden ser vistas por miles de personas a través de las redes sociales. 

Los periodistas tienen como nuevas herramientas a las redes sociales que sirven como una ventana donde colocan información personal en sus perfiles de Twitter o Facebook sobre el lugar en el que trabajan. Esto genera que los medios quieran poner reglas estrictas sobre sus trabajadores para que no comenten sobre las decisiones que ponen en riesgo el nombre de la empresa.

Un caso conocido y que recoge la American Society of News Editors (ASNE) en la guía de "Las 10 mejores prácticas para medios sociales" es el que ocurrió en The New York Times donde se llevaba a cabo una reunión para mantener informado a su personal sobre los planes para cobrar por su contenido. Varios reporteros que asistieron a la reunión twitearon lo que el director ejecutivo, Bill Keller, había dicho. Rápidamente el tweet fue tomado por organizaciones periodísticas y blogs que reproducieron la información. Esta historia termino con el regaño al personal por haber sido indiscreto y que a su vez condujo a más historias.

"Los empleados editoriales escriben sobre la toma de decisiones en la sala de redacción. Ninguna de estas cosas es explicable en 140 caracteres, crean controversia y causan ardores estomacales innecesarios. Algunos periodistas persiguen la transparencia a expensas de la responsabilidad profesional." (ASNE)  

A raíz de estos incidentes muchos medios se han apresurado en establecer políticas claras frente a estas indiscreciones. Como The Washington Post

“Las páginas personales en línea no son el lugar para la discusión de temas internos de la sala de redacción tales como fuentes, reportería de historias, decisiones para publicar o no publicar, asuntos personales y asuntos personales o profesionales inconvenientes que involucran a nuestros colegas. Lo mismo vale para opiniones o información con respecto a cualesquiera de las actividades de negocios de The Washington Post Company. Tales páginas y sitios no deberían ser usados para criticar competidores o aquellos que tienen opiniones diferentes sobre nuestro periodismo o periodistas” (ASNE).

0 comentarios:

Publicar un comentario